Desventuras y milagros

La Rataplan era una vía moderna ochentera, abierta por arriba y muy bien asegurada, fue un éxito inmediato, numerosas cordadas la escalaron cada fin de semana durante muchos años, yo mismo la repetí en varias ocasiones al poco de abrirla, era una escalada muy asequible y bonita a la vez. Desgraciadamente a día de hoy la vía se haya en un estado deplorable, alguien le ha añadido tal cantidad de paraboles que roza lo ridículo, cualquier parecido con la vía original es pura coincidencia; su escalada se ha degradado hasta el punto de convertirla en un puro trámite sin valor alguno. Desgraciadamente no es un caso aislado si no una forma de hacer en toda la arruinada zona de Gorros. Comparar la reseña original con la actual. 

Todas las agujas montserratinas poseen una base ancha que se va estrechando hasta culminar en la cima. Aparentemente, estando a pie de vía pueda llevar a engaño que no interfieran unas vías con otras, pero apenas escalados unos pocos metros la realidad choca en nuestras caras sin compasión alguna.  En el caso que nos ocupa, la vía que lleva por nombre el conocido mantra budista de la joya del loto "Om Mani Padme Hum" usurpa la arista por la que discurre la clásica "Aresta Bruc" lo hace a base de expansión y sin ningún respeto, vivo ejemplo de lo que es una vía mierdosa de las muchas que abundan en la montaña santa. No comprendo como nadie la ha des-equipado, supongo que esas pes expansivas tendrán algo que ver... La joya del loto siempre ha sido y será la Aresta Brucs.