Desventuras y milagros

La cara oeste dels Flautats sin ninguna duda posee un puesto de honor entre los escenarios altamente llamativos de Montserrat, sin embargo no se encuentra -ni por asomo- entre los lugares favoritos de los escaladores de hoy en día, es más, resulta un paraje casi olvidado donde prácticamente no se escala ninguna vía de forma regular. La GESAM a la Punxa llevaba años queriendo escalarla, la verdad es que no defrauda, es una vía muy bella, ¡y contundente! no tiene ni una sola expansión en las tiradas, en las reuniones sí, pero son una puta ruina a restaurar, si vais no os fiéis de ellas y buscar alternativas para descargarles peso.  La segunda tirada es una fisura guapa que se equipa a base de cacharros gordos, camalots 4 y 5, sin ellos cuidadín eh.. que debe dar miedo, pues son 45 metros limpios todo el rato en fisura ancha, los números pequeños te los puedes meter por donde te imaginas... si no se lleva el nº 5 tampoco creo que pase nada, pero repetir el nº 4 un par de veces, a

Salida con el Rafa a la Puigmal, soberbia y elegante como ella sola, una de las más bellas escaladas del repertorio montserratino y más allá. Nos hemos sentido muy pequeños y sobrecogidos por el vacío, mientras pensábamos en la época en que fue ascendida por primera vez, toda una proeza, enormes los escaladores de los años 50.