Anglada-Vergés a la Monja

El martes con Ramón (Lagarto sordo) subimos a Frares con la intención de escalar la Monja y alguna otra aguja si disponíamos de tiempo, pero el día amaneció gris, frío y oscuro. Hacía mucho, pero mucho mucho que no pasaba yo tanto frío....
un día de perros para haberse quedado en casita sin ninguna duda, pero es que no aprendemos, somos "asin"... ya es la segunda vez que nos dirigimos a la Monja, y una vez ahí el implacable clima nos dice: -chatos, ¡hoy no!, pero en esta ocasión no le hacemos caso.

A pie de vía, sinceramente, yo me habría dado la vuelta, hubiera movido mi congelado cuerpo dirección Can Massana ipso-facto, Ramón sin embargo, muy valeroso él, sube raudo un montón de metros por el árbol donde comienza el primer largo, yo mientras le aseguro, confió en que baje, pues la tirada se las trae.... una vez arriba del árbol se pasa a la roca y se detiene un buen rato, pero para mi sorpresa continúa, y continua y continua, ¡Dios! ¿a que me va a toca subir?....
La tirada es expuesta de cojones, igual para el primero que para el segundo, en caso de caída el sartenazo es ¡mayúsculo!, eso suponiendo que aguantaran las dos únicas chinchetas que tiene el largo, que lo dudo tanto, son solamente psicológicas. El flanqueo es largo y muy guapo, pero al loro, que es prácticamente como ir sin cuerda, no digo más.
L2 y L3 fáciles y rápidos.

Comienzo el último largo, la primera expansión no se ve, pongo un tascón y un puente de roca, en unos 10 metros llego a la chapa, pienso: -buahhh, yo ahí no colgaría ni la mochila... si le meto el pedal se rompe antes de subirme, qué miedo... Desde luego yo de ahí no pienso descolgarme para bajar, así que intento chapar el siguiente buril antes de colgarme del primero, para así al menos tener dos, antes me miro y me remiro bien que todo disipe al máximo, una cuerda solo por seguro, un cordino por detrás de la chapa para cuando se rompa, sé que va a romperse, el puente bien montado... Una vez todo bien "atado" me cuelgo de la segunda chapa y pataplaf, ¡sartenazo! me voy para abajo golpeándome con todo, está claro que estas reliquias no aguantan un gordo colgando, es más, diría que si cuelgas la cantimplora tampoco aguanta.... en fin, esto nos pasa por gilipollas, colgarse de Ae's originales de los 60's es una lotería, ¡y a veces toca!

Todas las precauciones que he tomado han funcionado y solo he bajado dos metros escasos, romper ese primer buril era irse contra el suelo y después bajar rodando la Monja. 
El compañero me baja a la reunión , estoy dolorido me he dado un golpe en un codo, tengo una rodilla con sangre, me falta un trozo de piel en un dedo que no veas como escuece, una quemada en una mano y un tobillo torcido, todo eso por una caidita de nada! 
Para dar un poco de ambiente empieza a llover y ya no parará hasta el coche. Ramón sube rápido a desmontar la paradita y me saca con un largo más de flanqueo al collado. Recogemos todo y p'abajo ¡con el tobillo torcido!, pero con mis bastones y la ayuda de Ramón poco a poco, despacio despacioooo, chino chaaaano... fui haciendo, y en tres horitas "de nada" llegamos a los coches, tres horitas de nada lloviendo con fuerza, já! 
Y yo que no tenía muchas ganas de aventura ese día....
Salud titos! ...y a ver si arreglamos esos Ae's dejados de la mano de dios.

















Comentarios