Juan Gutiérrez a la Paret del Dispensari

Dando por hecho que todos los que gustamos de trepar por las rocas somos un poco raritos y que buscamos sensaciones diferentes al hacerlo, tenemos la enorme suerte de disponer en Catalunya de montones de <Vías de escalada> de todo tipo: largas, cortas, equipadas, desequipadas, semiequipadas, bonitas o feas (esto es muy personal), seguras, expuestas, equipadas por arriba, abiertas por abajo etc... También es un hecho que aunque cada uno tenemos nuestras preferencias TODOS escalamos una combinación de todo; y un día hacemos una vía clásica desequipada y otro una vía moderna full equip, o le metemos caña a una vía difícil y otro día a una facilita con otro compañero. 
Dicho lo cual las sensaciones en la escalada son diversas, y todas ellas interesantes, ya sea cuando pasamos miedo y toca apretar el culo sintiendo que nos superamos, o cuando hacemos un love-climb y disfrutamos enormemente de una escalada relajada sin complicaciones y lo pasamos teta. 
¡Vale!, ¿y todo este preámbulo a cuenta de qué? 

...pues a cuenta de que las sensaciones durante esta vía eran malísimas, y nuevas... no las conocía y me eran terriblemente desagradables, dudaba de si estaba escalando o currando en una obra, encontrarle un sentido a toda esa ilógica, fea y forzada ferretería vertical no me era posible, me "destrempaba" transitar por todos esos materiales de ferretería ajenos al mundo de la escalada. Desde niño una de las cosas que me atrajo de la escalada fue su material, pitones, plaquetas, ochos, mosquetones... 
Bueno, creo que no vale la pena continuar. Una vía feísima, propongo el término "escalada industrial" ahí lo dejo.














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